El Gobierno del estado brasileño de Acre, en la frontera con Bolivia y Perú, confirmó este martes que más de 11.000 personas han tenido que abandonar sus hogares en esa localidad debido al desbordamiento del río Acre, que en horas de la mañana alcanzó los 16,2 metros de nivel.

De acuerdo con el ente, unas 17 ciudades han sido afectadas y se encuentran desde el domingo en estado de emergencia, pero en 10 de ellas la situación ha sido peor, por lo que se han dispuesto 58 albergues para atender a la población y todos han recibido apoyo del Gobierno federal.

Entre los municipios que figuran en estado de emergencia, se encuentran: Assis Brasil, Brasileia, Capixaba, Cruzeiro Do Sul, Epitaciolândia, Feijó, Jordão, Mâncio Lima, Marechal Thaumaturgo, Plácido De Castro, Porto Acre, Porto Walter, Rio Branco, Santa Rosa Do Purus, Sena Madureira, Tarauacá y Xapuri.

De esos municipios, es Jordão el más crítico, con el 80 por ciento de la población local afectada por las inundaciones.

El coordinador de la Defensa Civil estadual, Carlos Batista, indicó que el Estado brasileño se ha movilizado y ha dispuesto recursos para solucionar la situación de los damnificados.

«El Gobierno ha publicado algunos decretos y ya se ha puesto en contacto con el ministro de Integración y Desarrollo Regional, Waldez Góes, para solicitar recursos adicionales para atender las necesidades de las poblaciones afectadas en todo el estado», precisó.

En ese sentido, el gobernador de Acre, Gladson Cameli, confirmó en cadena estadual de radio que el ministro de Integración Nacional, Waldez Góes, y la ministra de Salud, Nísia Trindade, mostraron su disposición para ayudar a Acre.

El gobernador regional destacó la importancia de la unidad en este momento tan difícil para todos los habitantes de Acre, y aseguró estar al habla con los alcaldes y haber dispuesto la estructura del Estado.

«Aprovecho para agradecer al Gobierno federal que está dispuesto a ayudar, ya que necesitamos el decreto de alerta para que las transferencias e insumos se trasladen a nuestro estado”, subrayó Cameli.

El desbordamiento del río Acre también ha afectado al municipio boliviano de Cobija, donde unas 500 familias de han visto afectadas, y las autoridades analizan la declaración de desastre, luego de que en la víspera el Concejo Municipal declarara emergencia.

Las aguas del río Acre comenzaron a subir de nivel el pasado domingo a causa de las fuertes precipitaciones que se registraron en la zona, producto del cambio climático. De acuerdo con las estadísticas, en 2012 la crecida del río superó los 14 metros y los 15 metros en el 2015.

Fuente: Tele Sur