Es un ejercicio a veces de inconsciente escribirlo en agosto, visto lo que hemos visto en otras temporadas. Pero lo vamos a hacer. Este Manchester United sí convence. El equipo dirigido por Ten Hag consiguió ante el Southampton (0-1) su segunda victoria consecutiva tras la exhibición frente al Liverpool del lunes gracias a un solitario tanto de Bruno Fernandes, una de sus estrellas que menor nivel había demostrado en este inicio de temporada.

El encuentro se presumía como el del debut de Casemiro con su nueva camiseta. Íbamos a decir con la camiseta roja del United, pero lo hizo con la tercera equipación, de un verde cuya estética es bastante discutible. En cualquier caso, el mediocentro brasileño no fue titular, como tampoco lo fue Cristiano. Ten Hag hizo bueno el dicho de no tocar lo que funciona y repitió el once que derrotó al Liverpool, con Maguire también en el banquillo.

El equipo red devil funcionó a la perfección. La primera mitad fue un ejercicio de asedio sobre la meta de un inspiradísimo Bazunu. El resultado no se movió, gracias a las intervenciones del meta costamarfileño, pero la imagen de los de Ten Hag fue excelente una vez más.

A pesar de ello, el fantasma de una igualada sobrevoló en un par de ocasiones la meta de De Gea y, sin embargo, Ten Hag siguió confiando en su once fetiche. Y encontró su premio. McTominay subió el balón hasta que cayó en los pies de Sancho en la frontal del área. El recuperado extremo inglés abrió a banda derecha donde Dalot centró y, al toque, Bruno Fernandes remató con precisión para poner el 0-1 en el marcador.

Poco después de haber encontrado el premio del gol, Ten Hag dio entrada a Cristiano Ronaldo. En la primera jugada se encendieron todas las alarmas: el portugués fue al suelo tocándose la rodilla.

Tras ser atendido dentro y fuera del terreno de juego, el portugués volvió al césped, minutos antes de que entrar el hombre del momento en Old Trafford: Casemiro.

El brasileño entró en el 80 por Elanga y tuvo su primer contacto con sus nuevos compañeros, aunque sin mucha incidencia en el juego.

Es la primera vez que el United no encaja goles esta temporada y la primera vez desde febrero que gana dos partidos seguidos en Premier League. Aunque da miedo creérselo, este United funciona. O, al menos, lo parece.

Fuente: Diario Marca