Ha sido un caso corto, pero qué caso. Ni una semana ha pasado desde que MARCA soltase la inesperada bomba del mercado: el Manchester United estaba en Madrid de caza, con Casemiro como uno de sus principales objetivos. Poco después el asunto tomaba cuerpo, con este periódico también informando de que el jugador meditaba muy seriamente decir adiós. Y dicho… y hecho: ya es oficial la marcha del ’14’ del Real Madrid a Inglaterra.

A inicios de mes, aproximadamente, el Manchester United comenzó a moverse, sin prisa, pero sin pausa, por el brasileño. En ese nacimiento de la estrategia el club inglés ya percibió que el futbolista estaba abierto a escuchar y negociar, aludiendo sensaciones de fin de ciclo en un equipo del que será despedido como una leyenda histórica.

El factor económico también pesó mucho, lo que más, ligado a la extensión del vínculo. Casemiro recibirá en Mánchester alrededor del doble (sin alcanzarlo) de su salario como madridista, con el atractivo extra de que será durante cuatro temporadas más una opcional, hasta 2026 o 2027, y no hasta 2025, el compromiso que le ligaba al Real Madrid. La propuesta era tan tentadora que prácticamente obligaba a caer en ella, convienen todos los actores de esta trama.

Fuente: Diario Marca