Nicaragua considera el sabotaje a los gasoductos Nord Stream 1 y 2 como un acto de terrorismo de Estado perpetrado por los países occidentales, declaró el Canciller nicaragüense, Denis Moncada.

«Es un claro ejemplo de un acto terrorista por parte de países enemigos de la Federación de Rusia. El Gobierno de Nicaragua se opone claramente a estos intentos occidentales de practicar el terrorismo de Estado«, dijo el alto diplomático en diálogo con Sputnik.

Cuestionado sobre si cree en las versiones que descartan la implicación de Washington en la voladura de los gasoductos, Moncada señaló que «está muy claro qué países ejecutan estos actos –la OTAN, EEUU, sus aliados– contra los países que intentan defender su seguridad».

El canciller nicaragüense insistió en que Managua aboga por respetar la soberanía de los países.

El 26 de septiembre de 2022, tres de las cuatro líneas de los gasoductos rusos Nord Stream 1 y 2 fueron blanco de sabotaje con cargas explosivas en el fondo del mar Báltico cerca de una isla danesa y frente a las costas suecas, zonas bajo control de la OTAN.

El pasado 8 de febrero, el periodista estadounidense Seymour Hersh, ganador del premio Pulitzer, afirmó que buzos militares de Estados Unidos colocaron cargas explosivas bajo los gasoductos rusos durante los ejercicios Baltops de la OTAN, a mediados de 2022, que luego fueron activadas por los noruegos.

Alemania, Dinamarca y Suecia se han negado a investigar el sabotaje conjuntamente con Rusia ni comparten con ella los resultados de sus pesquisas.

El Kremlin declaró en repetidas ocasiones que la investigación del atentado contra los Nord Stream debe ser transparente y que el mundo debe conocer al culpable. Por su parte, la Fiscalía General rusa abrió investigación por un acto de terrorismo internacional.

Fuente: Sputnik