Los sabores picantes en las comidas nicaragüenses son característicos y su intensidad va en dependencia del gusto del consumidor.

En el sur del país, en una comunidad productiva del municipio de Rivas, específicamente en San Jacinto, se cultivan cuatro de las variedades más intensas de esta hortaliza.

“Tenemos las variedades Habanero, Cayena, Tabasco y Jalapeño. En estas variedades nos estamos intensificando por la demanda que tiene en zona”, asegura Félix Villareal, productor de chile.

La cosecha es comercializada en el mercado rivense permitiendo dinamizar la economía del productor, así como garantizar productos inocuos para el consumidor.

“Se vende conforme a la demanda, aunque en un futuro nos gustaría procesarlo y vender un producto transformado, con mejor calidad y precio”, afirmó Villareal.

El chile es un semi arbusto con un ciclo productivo que va en dependencia de las condiciones climáticas, el buen manejo que se le ha dado a este cultivo en particular, ha permitido una excelente cosecha.

Don Félix asevera que, ha tenido buena demanda por lo que se ha planteado extender el cultivo.

Productos inocuos listos para el consumo

Con el acompañamiento del Ministerio de Economía Familiar (Mefcca) ha logrado producir sus propios bioinsumos para el desarrollo de cultivos orgánicos, actualmente, se cosechan en unos 50 quintales de chile, que están sembrados en un cuarto de manzana de terreno.

Esta buena práctica lo ha llevado a diversificar sus cultivos, con otras hortalizas como chiltomas, tomate y plantas frutales como; papaya y cítricos.

Con esto también surte la demanda comercial, sin embargo, el principal uso es para el auto consumo, que también se traduce, en un significativo aporte a su economía.

Periodista: Raquel Arce