El Barça necesita un título como el comer. Es la vitamina que le hace falta para recuperar la autoestima perdida tras su calamitosa gestión económica y deportiva de los últimos tiempos. Y está cerca de poder lograrlo tras derrotar al Betis en los penaltis tras una disputada semifinal en la que Ter Stegen fue decisivo deteniendo los lanzamientos de penalti de Juanmi y William Carvalho. Este domingo, 638 días después de que levantara la última Copa lograda contra el Athletic, tiene la opción de llevarse la Supercopa en un nuevo Clásico ante el Real Madrid.

El partido comenzó con un Barcelona más metido en el partido ante un Betis que perdía el balón con facilidad. El cuadro bético sin balón es otro equipo y los catalanes mandaban de inicio. Aún así, la primera ocasión fue para ellos tras un mal pase de Koundé que dejó a Fekir solo ante Ter Stegen pero el francés no estuvo lo suficientemente rápido y Araújo llegando desde atrás salvó el gol.

En el minuto 23 quedó de manifiesto la eficacia del fuera de juego semiautomático para desgracia del Barcelona. Pedri marcó tras rematar un centro de Raphinha pero la tecnología demostró que el brasileño estaba en fuera de juego por… medio pie.

Esta jugada puso en aviso al Betis que tuvo sus mejores minutos a continuación con dos claras ocasiones para adelantarse en el marcador. Primero, en un cabezazo de Pezzella a la salida de un córner que obligó a Ter Stegen a lucirse y después con un centro envenenado de Luiz Henrique que no encontró rematador pese a que Borja Iglesias se quedó a centímetros de lograrlo. Los béticos tuvieron sus opciones pero fue el Barcelona quien se fue con ventaja al descanso. Lewandowski, bastante fallón hasta ese momento, recibió un buen pase de Dembélé y adelantó a los suyos en dos tiempos tras aprovechar un rechace de Pezzella a su primer remate. El gol fue un mazazo para los béticos que se agigantó después de que Ter Stegen evitara el 1-1 en dos remates de Rodri y Luiz Henrique. Es lo que tiene perdonar ante estos equipos.

Los últimos minutos fueron de ida y vuelta y ambos equipos tuvieron sus opciones para evitar la prórroga. Lewandowski marcó tras un pase de Ferran Torres pero el ex del City estaba en fuera de juego. Minutos después fue Miranda quien tuvo el 2-1 pero Ter Stegen lo evitó. Ya en el tiempo de añadido Ansu Fati tuvo una buena opción que desbarató Bravo y Fekir tuvo la última con un disparo que se fue arriba. Al igual que en la otra semifinal, dos equipos justos de fuerzas tuvieron que disputar media hora más cuando lo más sensato podría ser ir directamente a los penaltis.

Fuente: MARCA