Más de 740 migrantes murieron durante el último año mientras intentaban llegar a Estados Unidos desde México, lo que supera en más de 200 la cifra del año precedente, reveló una fuente autorizada.

Acorde con el Departamento de Seguridad Nacional estadounidense, desde el inicio del calendario fiscal, con fecha del 1 de octubre de 2021 y hasta el presente, se notifican 748 decesos, lo que entraña un nuevo récord frente a los 557 fallecimientos reportados durante los 12 meses anteriores en la frontera suroeste.

En su afán por llegar a territorio estadounidense, los migrantes enfrentan condiciones extremas tales como calor intenso o aguas turbulentas, mientras algunos activistas advierten de que estos se ven obligados a recorrer caminos cada vez más riesgosos.

«Los migrantes, refugiados y familias enteras están utilizando rutas más remotas y peligrosas para llegar a Estados Unidos«, declaró a la cadena noticiosa Fernando García, director ejecutivo de la organización Border Network for Human Rights.

Por su parte, la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza del gigante norteño reveló en un comunicado que los grupos criminales ponen en peligro imprudentemente las vidas de las personas traficadas para su propio beneficio económico.

«Las organizaciones de contrabando abandonan a los migrantes en zonas remotas y peligrosas, lo que provoca un aumento en el número de rescates, pero también, trágicamente, un aumento en el número de muertes. El terreno a lo largo de la frontera es extremo, el calor del verano es severo, y los kilómetros de desierto que los migrantes deben caminar después de cruzar la frontera son implacables«, abundó la declaración.

De acuerdo con la información, el número de búsquedas y operaciones de rescate, casi 19 mil, también creció exponencialmente durante el último año, frente a las más de 12,800 notificadas en el trascurso del calendario anterior.

Fuente: Prensa Latina