Kim Kardashian se ha convertido en una gran estrella en Estados Unidos con el paso de los años. La filtración de su vídeo sexual, unida a su llegada a la televisión de la mano del reality que protagoniza junto a su familia, ‘Keeping Up with the Kardashians’, le han hecho alcanzar el pico más alto de la fama. Una fama que le ha hecho también amasar una fortuna multimillonaria, gracias también a su olfato en los negocios.

Y es que como empresaria ha querido dar un paso más en el mundo de los negocios, y por ello acaba de lanzar su nueva empresa, SKKY Partners, dedicada al capital de riesgo y cuya función es la de centrarse en inversiones tanto de control como minoritarias en empresas de consumo y medios de comunicación de alto crecimiento y líderes en el mercado, así como empresas de productos de lujo, de moda, turismo, entretenimiento y comercio electrónico.

Una firma que Kim Kardashian ha cofundado con Jay Sammons, un antiguo ejecutivo de Carlyle, también dedicada al sector del consumo, y en la que su madre, Kris Jenner, también será una de sus socias. “Juntos esperamos aprovechar nuestra experiencia complementaria para crear la próxima generación de firmas de capital de riesgo del sector de consumo y medios”, ha escrito Kim a través de su perfil en las redes sociales.

En 2019 se embarcó en el mundo de los negocios, creando Skims, una firma de ropa interior y otras prendas de vestir que está valorada en 3.200 millones de dólares, tal y como tasaron el pasado enero. Una marca que ha sido promocionada por los diferentes rostros de una familia que bien podría decirse que es de las más famosas del mundo.

De la mano del mundo de la belleza, Kim Kardashian también tuvo éxito en los negocios, con KKW, donde dio entrada al grupo Coty con la venta de un 20% de la empresa, que equivalía a 200 millones de dólares, y que significaba que el valor total de la marca se situaba en los 1.000 millones de dólares.

Fuente: Yahoo Noticias