El Monitor Euromediterráneo de Derechos Humanos denunció hoy la violencia sexual, tortura y tratos inhumanos a que fueron sometidas prisioneras palestinas por parte del Ejército israelí en la Franja de Gaza.
En un nuevo informe, la organización no gubernamental documentó testimonios sobre los maltratos a féminas tanto en el terreno como en las prisiones de ese país.
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Las detenidas, liberadas recientemente, denunciaron palizas, amenazas de violación si no cumplían las órdenes, y cómo fueron obligadas a desnudarse por completo y sometidas a registros sin ropa. Varias fueron atadas y estuvieron con los ojos vendados durante largos períodos, detenidas en jaulas abiertas en condiciones de extremo frío y sin recibir alimentos ni medicinas.
El Monitor señaló que las amenazaron constantemente con privarlas de ver a sus hijos y les arrebataron el dinero y artículos que tenían en al momento de su arresto.
El grupo explicó que sus activistas entrevistaron a decenas de mujeres que declararon haber sido sometidas a acoso sexual y verbal.
Fui arrestada el 28 de diciembre último en una escuela de la ONU, explicó N.H, de 45 años, quien solicitó mantener el anonimato por temor a la reacción del Ejército. Residente del barrio Sheikh Radwan, en la ciudad de Gaza, ella afirmó que, luego del asalto al plantel educativo, las mujeres fueron trasladadas a un cuarto.
Tras ingresar a la habitación, nos registraron mientras estábamos completamente desnudas mientras las mujeres soldados continuaron golpeándonos brutalmente, subrayó.
Indicó que fue sometida a registros sin ropa en varias oportunidades en lugares abiertos y en presencia de soldados varones, mientras que una militar israelí la insultó, la escupió y comentó sobre su cuerpo. Narró que estuvo detenida durante 11 días dentro de una jaula a la intemperie, pese a la temporada invernal.
Por su parte, N.M., de 39 años, quien perdió a tres hermanos, detalló que los uniformados la amenazaron con violarla si no obedecía las órdenes de grabar videos en los que atacaba al Movimiento de Resistencia Islámica.
Al momento de ser arrestada me ataron las manos por detrás, me colocaron una venda en los ojos mientras fui sometida a un registro en ropa interior, comentó, por su parte, S.H, de 20 años y oriunda del campamento de refugiados de Jabalia.
Fuente/Prensa Latina