55 asociaciones y federaciones nacionales que constituyen la UEFA han aprobado de manera unánime una declaración que condena enérgicamente la creación de una nueva competencia denominada la Superliga, comunicó el ente rector del fútbol europeo en su página oficial.

«El Congreso de la UEFA insiste en que la ‘Superliga‘ cerrada va en contra del concepto de lo europeo unificado, abierto, solidario y basado en principios de valores deportivos. La UEFA y sus federaciones miembros creen en un modelo, que se basa en la competición abierta, la solidaridad y la redistribución para garantizar la sostenibilidad y el desarrollo del juego en beneficio de todos y la promoción de los valores europeos y los resultados sociales«, indica el comunicado.

«Los clubes conspiradores obviamente no han visto que su estatus de hoy no fue logrado desde la nada, sino gracias a que formaban parte de un sistema europeo dinámico donde los clubes grandes, medianos y pequeños han contribuido a los éxitos y pérdidas de todos”, sostuvieron. Al mismo tiempo, los miembros de la UEFA subrayó que esta acción es una ofensa a los valores europeos y al mérito deportivo asumir que tienen derecho a separarse y reclamar el legado que todos construyeron.

«La UEFA, sus federaciones miembros y todos aquellos que aman el fútbol se mantienen firmes, resistirán y lucharán fuertemente contra este movimiento de los propietarios de estos clubes y sus patrocinadores en la mayor medida posible. Sabemos, moralmente, lo que está en juego y protegeremos el fútbol de un clan egoísta al que no le importa el juego. Somos el fútbol europeo. Ellos no son el fútbol europeo«, aseguraron.

El domingo, se anunció la creación de la Superliga europea, conformada en principio por 12 clubes: Atlético de Madrid, Real Madrid, Barcelona (España), Milán, Inter, Juventus (Italia), Arsenal, Chelsea, Liverpool, Manchester City, Manchester United y Tottenham Hotspur (Inglaterra). Se espera que se unan otros tres clubes antes de la temporada inaugural.

El presidente de la FIFA, Gianni Infantino, afirmó que el organismo mundial, por su parte, desaprueba la creación de la Superliga, y tachó a la nueva competición de «una tienda cerrada que es una escisión de las instituciones actuales«.

La iniciativa provocó el contundente rechazo no solo de parte de la FIFA, la UEFA y las ligas nacionales, sino también de los líderes de varios países. Por ejemplo, el primer ministro de Reino Unido, Boris Johnson, escribió en su cuenta de Twitter que los planes de crear la Superliga «serían muy perjudiciales para el fútbol«. «Golpearían en el corazón del juego doméstico y preocuparon a los fans en todo el país».

Los clubes de Francia no apoyaron la creación de la Superliga, una decisión alabada por el presidente del país, Emmanuel Macron. «El estado francés apoyará todas las gestiones de la LFP Liga de Fútbol Profesional, la FFF Federación Francesa de Fútbol, la UEFA y la FIFA para proteger la integridad de las competiciones federales, sean nacionales o europeas«, declaró en un comunicado.

Fuente: RT en Español