El ministro japonés para los Juegos Olímpicos, Tamayo Marukawa, ha anunciado este jueves que no habrá público en las gradas durante las competiciones deportivas que comienzan el próximo 23 de julio. Así lo ha decidido el Ejecutivo nipón tras las conversaciones mantenidas con los organizadores.

El estado de emergencia entrará en vigor el lunes 12 de julio para frenar el aumento de casos de la Covid-19 en la capital, ha dicho Suga tras reunirse con el comité gubernamental que gestiona la pandemia, aunque en la práctica la medida no supondrá mucho cambio con la situación actual, al margen de un endurecimiento de restricciones para los comercios.

El país asiático ha decidido, asimismo, prolongar dicho nivel de alerta en la región de Okinawa (sudoeste), donde ya se encontraba activa, y mantener ciertas restricciones en las prefecturas de Chiba, Saitama y Kanagawa, colindantes con Tokio y donde también se disputarán competiciones de los Juegos.

Según informa el Japan Times, los restaurantes de Tokio y Okinawa deberán dejar de servir alcohol y cerrar a las 20:00 horas. «Los nuevos casos en el área metropolitana de Tokio han aumentado desde junio«, ha dicho Suga. «Se han hecho necesarias medidas más estrictas en esas zonas, pero podrían levantarse antes si vemos pruebas del impacto positivo de la distribución de la vacuna«.

Los organizadores del evento, cuya inauguración está prevista para el 23 de julio, nunca han descartado la celebración de competiciones a puerta cerrada en función de la situación epidémica, sin embargo, recientemente habían anunciado que tenían previsto permitir la entrada de hasta 10 mil espectadores o la mitad del aforo de las instalaciones.

Fuente: Mundo Sputnik