La readaptación social es una de las metas que se persigue en los diferentes Centros penitenciarios de Nicaragua, donde los condenados a sanciones privativas de libertad tienen la oportunidad, entre otras cosas, de aprender un oficio o continuar sus estudios, incluyendo carreras universitarias, en las que, en 2025, participarán más de dos mil privados de libertad, así lo anunció la Copresidenta de la República de Nicaragua, Rosario Murillo, en una comunicación televisiva.

“También tenemos el programa de formación integral para las personas que están en el Sistema Penitenciario Nacional en todas sus dependencias, con distintas universidades. Es una proeza. Estamos matriculando e iniciando el año con los centros penitenciarios del país, abriendo cursos y carreras universitarias para 2,000 personas que están integradas en las distintas universidades”, señaló la copresidenta.

Murillo detalló el seguimiento a los privados de libertad que estudian según la carrera que han seleccionado. La mayoría de ellos estarán en la Universidad Agraria, que atenderá a 1,046 estudiantes; 570 serán atendidos por docentes de la UNAN Managua, León y Matagalpa; 81 en la Uraccan; 79 en el INATEC; 72 en la Universidad Casimiro Sotelo; 33 en la Universidad Nacional de Ingeniería y 25 en la BICU.

Murillo deseó éxito a cada uno de los reclusos que se esfuerzan por alcanzar un logro académico y salir transformados del sistema penitenciario. Aseguró que todo ser humano merece una oportunidad para rehacer su vida luego de pagar su deuda a la sociedad.

“Una oportunidad para corregir, reinventar y avanzar por nuevas sendas de bien, sendas de aprendizaje y, sobre todo, de enmienda. Un propósito de enmienda que, a través del estudio y la educación, sabemos que se cumple”, puntualizó la copresidenta.

Periodista: Héctor Calero