A diferencia de varios países de la región, en Nicaragua la estabilidad del suministro de energía eléctrica garantiza el servicio ininterrumpido las 24 horas del día, este hecho permite el desarrollo de labores comerciales, industriales y domiciliares con absoluta normalidad.

Según especialistas desde el año 2007 en el país se ejecuta una política energética acertada, la que ha permitido diversificar la generación a través de fuentes renovables, garantizando además la conservación del medio ambiente.

El congelamiento en el precio de los combustibles es parte de la política energética, el subsidio a los derivados del petróleo ha incidido en el buen desempeño de la economía nicaragüense a pesar de la inestabilidad en el valor internacional del crudo.

Periodista: Pablo López