Un proyecto integral para la protección ambiental, enfocado en la reducción del mercurio que se utiliza en las pequeñas minerías, se ha puesto en marcha en nuestro país este año.

La estrategia se basa en sustituir el mercurio de la minería artesanal y desarrollar mejores prácticas ambientales con tecnologías alternativas viables, para lo cual se tiene previsto realizar un estudio completo de la situación real y cumplir con un proceso de capacitación a quienes trabajan en este sector.

«Todos tenemos conocimiento realmente de los efectos que ocasiona el Mercurio, especialmente en los niños y mujeres embarazadas, así como el efecto que ocasiona en el medio ambiente y los recursos naturales, de manera que en este sentido queremos concientizar a los mineros artesanos especialmente, que trabajan por cuenta propia, donde venimos a fortalecer el mecanismo y método, para gradualmente sustituir el Mercurio», señala la directora de la Comisión de Sustancias Tóxicas, Yelba López.

«Los principales consumidores del mercurio después de la industria médica son los mineros artesanales, quienes lo utilizan para recuperar el oro, pero el manejo que le dan es bastante indebido ya que lo manipulan sin protección y cuando está en estado de ebullición aspiran el vapor de este componente, que luego se aloja en el cerebro, pelo y otros órganos», detalló el experto Ruy Delgado de la Empresa Nicaragüense de Minas.

La otra afectación que está sustancia genera al medio ambiente, ocurre cuando los residuos de mercurio son depositados en los ríos, contaminando las fuentes hídricas y envenenando a los peces.

«Cuál es la idea, primero enseñarles a los mineros artesanales prácticas más aceptables para que puedan ellos continuar con sus negocios de minería que es muy rentable, considerando que es el primer rubro de exportación de Nicaragua y la erradicación del mercurio utilizando otras prácticas», explicó Delgado.

En nuestro país ya no se utilizan luces de neon con mercurio y termómetros de uso médico, por cuanto es un mineral tóxico, que causa daños al organismo humano y serias afectaciones ambientales, enfatizaron los conocedores en la materia.

Periodista: Román Rodríguez