Las autoridades meteorológicas de El Salvador achacaron hoy a una nube de Polvo del Sahara el denso calor que se siente hace días en esta nación centroamericana.

El ambiente está caldeado en El Salvador pese a la llegada del invierno, como llaman aquí a la época de lluvia, con aguaceros casi a diario, sin que por ello disminuya el bochorno imperante.

El meteorólogo Roberto González precisó que las primeras nubes de arena llegaron el 8 de julio, lo cual enrarece la atmósfera y genera una bruma cada vez más recurrente.

Según González, las concentraciones de polvo rondan los 90-100 microgramos cúbicos, lo cual genera calor durante el día y las primeras horas de la noche, con una suerte de pequeño efecto invernadero.

Así, el de por sí bastante caluroso oriente salvadoreño la sensación térmica alcanza los 40 grados Celsius por la poca humedad y la contaminación local, provocada principalmente por el tráfico.

El Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales ya advirtió que una nueva nube de polvo del Sahara podría llegar la primera semana de agosto.

Fuente: Prensa Latina