El Consejo de Seguridad de la ONU debatirá este viernes con carácter «urgente» la controversia entre Venezuela y Guyana por el Esequibo, un territorio rico en petróleo que se disputan hace más de un siglo y que preocupa a la comunidad internacional.

Foto: Yahoo Noticias / Vista aérea de Kaieteur, la cascada de una sola caída más grande del mundo, ubicada en la región Potaro-Siparuni de Guyana

En medio de una creciente tensión entre ambos países, a solicitud de Guyana el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas se reunirá este viernes a puertas cerradas a las 15h00 local (20h00 GMT) para abordar el conflicto, según la agenda oficial.

Tanto Caracas como Georgetown se acusan mutuamente de incurrir en «provocaciones» en medio de la disputa.

La tensión se elevó luego que Venezuela celebrara el 3 de diciembre un referendo consultivo en el que más del 95% de los votantes que participaron aprobó crear una provincia venezolana en el Esequibo, un territorio que representa 2/3 de Guyana, y dar nacionalidad venezolana a los 125.000 habitantes de la zona en disputa.

Tras la consulta, el presidente venezolano, Nicolás Maduro, que busca la reelección en 2024, anunció el otorgamiento de licencias para extraer crudo del Esequibo.

Analistas señalan que el referendo y el aumento de la retórica nacionalista del gobierno venezolano vinculada al Esequibo es un intento de distraer la atención sobre el llamado a elecciones libres en Venezuela el año próximo.

«Fue como una especie de globo de ensayo de cara a las elecciones presidenciales» para medir la «capacidad de movilización y tratar de afinar su estrategia para 2024», dijo Mariano de Alba, asesor del International Crisis Group.

«Refuerza la intención del gobierno de  adelantar una estrategia de dividir a la oposición, porque esa es la única manera que tendría una buena chance de ganar la elección presidencial en el año 2024», añadió.

El hallazgo en 2015 de importantes yacimientos de petróleo en aguas en disputa por parte de la petrolera estadounidense ExxonMobil agudizó la controversia, que tuvo un nuevo pico de tensiones el jueves luego del anuncio de Estados Unidos de ejercicios militares aéreos en Guyana.

El ministro de Defensa venezolano, Vladimir Padrino López, tachó los ejercicios como una «infeliz provocación».

Caracas había acusado el miércoles al presidente de Guyana, Irfaan Ali, de dar «luz verde» a bases militares estadounidenses en el Esequibo.

La Casa Blanca señaló que se opone a la «violencia» en la pugna territorial. «Obviamente no queremos que se produzca violencia ni conflicto» entre las partes, declaró a periodistas el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional, John Kirby.

En un primer acercamiento entre ambos gobiernos, los ministros de Exteriores de Venezuela, Yván Gil, y Guyana, Hugh Todd, acordaron el miércoles mantener «canales de comunicación» abiertos.

– «Solución pacífica» –

Brasil reforzó esta semana su presencia militar en sus fronteras con Guyana y Venezuela y el presidente Luiz Inácio Lula da Silva lanzó el jueves una advertencia.

«Lo que no queremos es una guerra en América del Sur, no necesitamos un conflicto», dijo Lula.

En una declaración conjunta emitida el jueves en la cumbre del Mercosur en Rio de Janeiro, Brasil, Argentina, Paraguay, Uruguay, Chile, Colombia, Ecuador y Perú instaron a Guyana y Venezuela «al diálogo» y la búsqueda de una «solución pacífica».

Lula propuso asimismo la mediación de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) en la disputa.

Rusia, aliado estratégico de Caracas, urgió el viernes a Guyana y Venezuela a resolver de manera «pacífica» la disputa.

Este litigio «debe resolverse en un espíritu de buena vecindad, encontrando soluciones pacíficas y aceptables para todos», acordes con la legislación internacional, afirmó en un comunicado la portavoz de la diplomacia rusa, María Zajárova.

– Una disputa centenaria –

Venezuela sostiene que el Esequibo forma parte de su territorio, como en 1777, cuando era colonia de España. Apela al acuerdo de Ginebra, firmado en 1966, antes de la independencia de Guyana del Reino Unido, que sentaba bases para una solución negociada y anulaba un laudo de 1899.

Guyana defiende ese laudo y pide que sea ratificado por la Corte Internacional de Justicia (CIJ), cuya jurisdicción es desconocida por Caracas.

«Nadie nos sacará de nuestra posición histórica de no reconocer la jurisdicción de la CIJ para resolver la controversia territorial con Guyana», señaló este viernes Delcy Rodríguez en X (antes Twitter).

«El único instrumento jurídico y vigente válido es el Acuerdo de Ginebra de 1966 que establece una solución válida y satisfactoria para ambas partes», agregó.

Las licitaciones a trasnacionales petroleras, a juicio de analistas, hicieron que la controversia adquiriera nuevas dimensiones.

«Guyana internacionalizó el conflicto en el momento en que comenzó a incorporar y acercar capital extranjero a través de la presencia de empresas transnacionales petroleras», comentó a la AFP Josmar Fernández, especialista en resolución de conflictos y delimitación de áreas marinas.

Fuente: Yahoo Noticias