Las zonas francas del país no fueron afectadas por completo debido a la COVID-19 y cerrarán este año con al menos 122 mil trabajadores activos, destacó el dirigente sindical de la CST, Luis Barbosa.

«Andábamos buscando los 125 mil cuando se vino la pandemia, entonces estamos, prácticamente, estables e iniciamos el 2020 con 110 mil en este sector económico, y no fue la debacle como ocurrió con Honduras, El Salvador, Guatemala y en el mismo Costa Rica«, explicó.

Los empresarios de maquilas implementaron estrategias ante la situación de salud, elaborando materiales como mascarillas, botas para la protección.

«Todo el equipo completo que se estaba exportando hacia Europa, Estados Unidos, se logró sobrevivir, las empresas lograron pasar el bache y recuperarse«, agregó.

En el caso de la construcción, las inversiones continúan hasta el año 2021, destacando la Pista Juan Pablo II en Managua, el hospital de León y el mismo centro asistencial de Ocotal en Nueva Segovia.

«En la (pista) Juan Pablo II están trabajando brigadas pequeñas, ahí tenemos unos 300 trabajadores que andan en demolición y limpieza, en el caso de León hay casi 400 obreros, en Ocotal que hay un gran avance, hay 280 (trabajadores) y en los otros que son hospitales primarios tenemos hasta 150 obreros», indicó.

Agregó que la situación que vive Costa Rica podría generar más empleos, por la gran cantidad de nicaragüenses que viven el vecino país del sur.

Periodista: Nerys Bonilla