Está más que comprobado que el perro es el más fiel y mejor amigo del hombre, pero alguna vez te has preguntado ¿por qué?

Una investigación del 2015 develó que cuando una persona mira a los ojos a su perro este último libera una hormona relacionada con el cariño.

Invierno de 1925, Nome, Alaska. Mientras el termómetro marcaba bajo cero, la difteria, infección bacteriana mortal, atacaba a los niños de la ciudad ocasionando varios fallecidos. El invierno era tan crudo que los medios de transporte tradicionales como el avión o el tren, no podían llegar al pueblo y se necesitaba antitoxina para atacar la afección. 

Un grupo de perros en trineo con un hombre de nombre Leonhard Seppala se introdujeron en un viaje de miles de kilómetros para transportar la inyección que podía salvar a los niños del pueblo. 

Esta es una de las historias más conocidas del mundo. Hollywood la inmortalizó en películas como Togo (2019) o Balto (1995).  Estas junto a la del japonés Hachiko (llevada al cine en 2009) son muestras de lo inseparables que son los perros y el hombre. 

A pesar de lo fieles e incondicionales que son los caninos con el hombre, datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) revelaron que de más de 300.000 perros que existen en el mundo, el 70 por ciento de estos no tiene hogar. 

Por eso, para concientizar contra el abandono y el maltrato de estos animales, desde el 2004 se estableció que cada 21 de julio se celebre el Día Mundial del Perro.

Pero más allá de lo sentimental y afectivo, está científicamente comprobado que los perros crean un lazo especial con los humanos.  

Los perros son más incondicionales que muchas personas. Es nuestro deber protegerlos, amarlos y repudiar toda acción de maltrato y abandono.  Ellos sufren, disfrutan, sienten como nosotros, mientras que solo nos brindan alegrías y protección a cambio de atención.

Fuente: TeleSUR