Si bien las pantallas que ocupan paredes enteras parecen estar enfocadas a los sectores público y profesional, LG Electronics presentó el pasado 14 de septiembre sus modelos de televisores de lujo destinados para uso en el hogar que sorprenderán a los compradores por sus gigantescas dimensiones.

La empresa surcoreana ofrece a sus clientes su línea de pantallas LG Direct View LED (DVLED) ‘Extreme Home Cinema’ que «permitirá a los espectadores sumergirse en un brillo cautivador, un color vibrante, con una relación de contraste amplia y unos tamaños de pantalla impresionantes»; lo que hará que los usuarios dispongan de su propio «cine en casa».

La pantalla funciona por medio de millones de diodos LED de 2 a 33 millones para crear una imagen final con brillo y contraste llevados a la perfección. A diferencia de los proyectores, las pantallas DVLED no necesitan estar en un espacio oscuro ya que son capaces de emitir brillo, de manera similar a un televisor normal.

Los compradores podrán elegir entre televisores con diferentes resoluciones que van desde 2K hasta 8K y no dependerán del tamaño de la pantalla. A su vez, el tamaño parece ser uno de los aspectos más fascinantes de la línea ya que LG ofrece una gama amplia de pantallas desde 108 a 325 pulgadas, siendo la versión más sorprendente el televisor de 325 pulgadas con resolución 8K. 

A pesar de que LG no ha precisado los precios de sus nuevos modelos, ya que de momento los televisores no se venderán en tiendas convencionales sino a través de un programa especial de distribuidores, los datos obtenidos por CNET confirman la exclusividad de los televisores. Así, la versión 8K de 325 pulgadas podría llegar a costar 1,7 millones de dólares.

Fuente: RT en Español