La espera del beneficio del régimen de convivencia familiar al menos para mil presos terminó, pues este miércoles se les abrió las puertas de las cárceles hacia la libertad.

Las autoridades del Ministerio de Gobernación (Migob) aprobaron que se les otorgará el beneficio legal de la convivencia familiar a mil privados de libertad por casos menores.

Ana Sofía Sotelo de 20 años de edad estuvo presa durante seis meses, agradeció a Dios y al Gobierno por el beneficio y confía que también más privados tengan la misma oportunidad.  «Doy gracias también porque recibió una beca universitaria para estudiar agro negocios que voy a continuar fuera».

Sotelo aseguró que mientras estuvo presa reflexionó mucho y que, con la ayuda de psicólogos y las autoridades del Sistema Penitenciario Nacional (SPN), hoy por hoy es una persona nueva.

La ministra de Gobernación, María Amelia Coronel, indicó que, son más de mil privados de libertad de todos los sistemas penitenciarios, los que recibieron el beneficio, para lograr que ustedes se incorporen a la sociedad con herramientas necesarias para trabajar y progresar.

«Hoy son mil familias que se reúnen y mil personas que reciben otra oportunidad de servir a la patria, de servir a la familia a las comunidades y de ir adelante«.

Beneficio legal

Coronel destacó que la oportunidad del beneficio legal de convivencia familiar se da sólo una vez. «Y lamentablemente para ustedes no se inicia de cero, por lo que siempre estarán nuestras recomendaciones de seguir de la mano de Dios y de sus familias«.

«Los que aprovecharon el tiempo y estudiaron, utilicen todo ese aprendizaje para buscar una vida digna y llena de prosperidad. Todo lo que queremos es que se incorporen a sus comunidades y hagan que sus familias se enorgullezcan del cambio que darán. Lo que llega fácil se va fácil por lo que deben ser constante y disciplinados«.

Los privados de libertad durante su estancia en el sistema penitenciario tuvieron la oportunidad de realizar sus estudios académicos y desarrollar habilidades y destrezas; herramientas que les servirán para su vida una vez puestos en libertad.

Esto en correspondencia al artículo 6 inciso tres de la ley 473, Ley del Régimen Penitenciario y Ejecución de la Pena.

Periodista: Celia Méndez