A través de la actualización del artículo quinto de la Reforma Parcial a la Constitución Política de Nicaragua, que integra los derechos individuales, políticos, sociales, de la familia, laborales y de los pueblos de la Costa Caribe, se amplían y fortalecen las garantías humanas para todos los nicaragüenses

Con esta actualización, se establecen nuevos derechos que se han materializado en los últimos años y se revitalizan aquellos que ya estaban consignados en la Ley Suprema.

Con estas reformas, se constitucionalizan los avances y logros de la Revolución en su segunda etapa. Asimismo, se oficializa el modelo de restitución de derechos, el modelo de desarrollo humano centrado en la persona, la familia y la comunidad, el modelo de justicia social e inclusión para todas y todos, y el modelo de equidad e igualdad. Estas reformas complementan el modelo de democracia directa, donde existe un único poder: el poder del pueblo.

Estas reformas amplían y fortalecen el listado de derechos de la constitución original. Se robustece el catálogo de derechos fundamentales ya existentes y se agregan numerosos derechos nuevos. En esencia, estas reformas significan todos los derechos para todas las personas.

Esta reforma hace justicia, ajustando y actualizando este principal documento político a la realidad que se ha venido construyendo. Su propósito es garantizar el protagonismo del pueblo en la construcción de su bienestar, asegurando una vida digna y justa para mujeres, hombres, niñas, niños, y para los pueblos originarios y afrodescendientes.

Periodista: Sinaí Espinoza