La pandemia de la Covid-19 incidió fuertemente en el turismo a nivel mundial y Nicaragua no fue la excepción, sin embargo, se espera que 2023 sea una de las mejores temporadas de verano, por lo que empresarios turísticos se preparan con los mejores servicios para atender a los vacacionistas.

Para la demanda de alojamiento en el país cuenta con casi siete mil habitantes, sin contar los apartamentos y la novedad de los B&B, que son los hospedajes en casas particulares.

El empresario turístico, Antonio Armas expresó que «ya se reportan hoteles al 100% de su capacidad en hoteles de playa, más de un 90% en Corn Island, e incluso los B&B reportan una buena ocupación, porque recordemos que el turismo es cambiante, una industria dinámica«.

También hay buenos reportes del transporte terrestre con turistas centroamericanos, igualmente se han reactivado y normalizado los vuelos internacionales, donde se mantiene un 95% de ocupación los asientos de las líneas procedente de Estados Unidos y de la región.

Se estima que, para la Semana Santa, unos dos millones de nicaragüenses se desplacen a los distintos destinos, por lo que todo el sector hotelero, alimentos y bebidas, así como una diversidad de servicios se preparan para lograr buenas ventas de sus productos.

«Va a tener una repercusión en todo el país, sobre todo en destinos que están volviendo a emerger como Matagalpa, Jinotega y Estelí que están reportando muy buenos números. Otro destino es la isla de Ometepe donde están llegando más turistas extranjeros«, dijo Armas.

Comentó que se siguen inaugurando más hoteles y se siguen mejorando las infraestructuras viales, mejorando los accesos a las playas y otros destinos turísticos.

Periodista: Tania Sirias