En los últimos dos años se ha registrado en Nicaragua, un incremento significativo de las áreas silvestres privadas, contabilizándose en la actualidad, unas 230 reservas biológicas, sin contar los territorios de protección pública.

En este caso el Ministerio del Ambiente y los Recursos Naturales (Marena), es la entidad pública gubernamental encargada de acreditar las reservas biológicas privadas, que se según las más recientes estimaciones, existen entre el 20 y 22% de áreas de conservación de biodiversidad.

«Nosotros vemos que el ecoturismo o el turismo de naturaleza viene destacándose y hay que estar claros que en Nicaragua antes era más el turismo de playa, pero ahora se está ampliando, pero hay que mencionar que ahora hay más iniciativas alrededor de este tema, por ejemplo en los colegios hay más educación ambiental y muchos colegios están visitando las reservas porque es un aprendizaje más vivo, más directo, con mayor propiedad sobre las relaciones de biodiversidad«, señaló el presidente de la cámara de turismo y cultura, Freddy Cruz.

Quienes conocen más sobre el tema de las reservas privadas, señalan que hay mayor interés en mejorar la oferta turística rural comunitaria.

«Todas las reservas están apuntando a la oferta de ecoturismo, tienen cabañas, senderos, tienen animales y una cantidad de servicios que mejoran la oferta, pero hay que mencionar el tema de las carreteras que se han construido en los últimos años en zonas que históricamente no tenían ningún acceso y eso es muy importante por la contribución que representa al sector«, destacó Cruz.

Otro elemento que destaca el presidente de la cámara de turismo y cultura, es la política nacional de apoyo al turismo en general, a través de los gobiernos locales y el Intur.

«En primer lugar las reservas son espacios de resiliencia climática, es decir están para favorecer el clima como primera tarea importante, entonces tenemos la conservación de la biodiversidad tanto animal como vegetal, o mejor dicho refugios de vida silvestre, igualmente se van haciendo corredores biológicos que necesitan para ampliar la conservación«.

Periodista: Román Rodríguez