según el Centro Nacional de Huracanes (NHC). Con vientos sostenidos de 215 kilómetros por hora y una presión de 947 milibares, Helene representa una amenaza significativa para la región.
Se espera que el huracán toque tierra en la tarde o noche en Big Bend, Florida, acompañado de lluvias torrenciales, vientos fuertes y peligrosas marejadas. Las previsiones indican acumulaciones de lluvia entre tres y seis pulgadas en el sureste de EE.UU., con zonas que podrían recibir hasta diez pulgadas.
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Helene aumentó en intensidad tras su paso por el extremo occidental de Cuba y ahora continúa su trayectoria en el Golfo de México, generando lluvias en el centro y occidente de la isla. Las bandas nubosas asociadas al sistema siguen afectando estas regiones.
Según la Administración Nacional de Océanos y Atmósfera (NOAA), la temporada de huracanes en el Atlántico ha superado el promedio, con una previsión de entre ocho y 13 huracanes formados hasta la fecha.
Fuente: teleSUR
