Miley Cyrus ha dejado claro que no pretende retirarse de los escenarios, aunque limitará sus presentaciones en directo a los platós de televisión y a auditorios de pequeña y mediana capacidad.

La intérprete estadounidense ha dejado claro que no pretende retirarse de los escenarios, aunque limitará sus presentaciones en directo a los platós de televisión y a auditorios de pequeña y mediana capacidad.

En su última charla con el diario The Sun, Cyrus ha ofrecido además otro motivo que explicaría su aversión a las producciones tan elaboradas y teatrales, una estrechamente ligada a la experiencia que vivió en su gira más multitudinaria y ambiciosa hasta la fecha, el «Bangerz Tour» de 2014.

En esa época, Miley Cyrus se destacaba como la artista más irreverente, polémica y, todo sea dicho, carismática de esa hornada de antiguas estrellas Disney que dieron el salto a la escena pop más comercial.

Gracias a éxitos como ‘Wrecking Ball’ y a su imagen provocadora, la diva se animó a llevar ese concepto tan arriesgado a los principales estadios de todo el mundo.

Sin embargo, Cyrus ha revelado ahora que ninguna productora quiso invertir en su espectáculo tal y como estaba diseñado, por lo que ella misma tuvo que costearse algunas de las iniciativas más atrevidas y controvertidas de la escenografía.

La artista no obtuvo ningún beneficio

«Fue una inversión en mí misma. Muchas de esas ideas eran tan extravagantes, que nadie quiso apoyarme en su elaboración«, ha recordado la afamada artista.

«Tenía camas gigantes, muñecos enormes y llegaba al escenario desde un tobogán que era una réplica de mi propia lengua».

También asegura que no ganó «ni un centavo» con el proyecto ante la enorme disparidad entre ingresos y gastos.

«No me llevé ni un centavo en beneficios porque quería que fuera excelente. Todo el mundo me preguntaba por qué hacía eso, me decían que iba a hacer cientos de shows sin ganar nada de dinero», ha apuntado.

El «Bangerz Tour», que fue la decimosexta gira que más recaudó en 2014, nunca fue concebido por Cyrus como una máquina de hacer dinero, sino como un impactante ejercicio de auto reivindicación.

«Les dije a todos que no hay nadie mejor para invertir que en una misma. Lo pagué todo de mi propio bolsillo para conseguir exactamente lo que quería, lo que mis fans merecían», ha defendido con orgullo.

Fuente: Yahoo Noticias