La actriz Megan Fox ha publicado una colección de poemas que ha titulado de forma muy adecuada «Pretty Boys Are Poisonous», (Los chicos guapos son venenosos) porque esa ha sido siempre su gran debilidad. La intérprete reconoce que es una romántica empedernida que a menudo acaba convirtiéndose en una tabla de salvación para cualquier hombre atractivo, roto por dentro y egocéntrico que se cruza en su camino.
Megan ha desvelado que a lo largo de su vida ha mantenido relaciones sentimentales abusivas a nivel emocional, y en una ocasión esos malos tratos pasaron al plano físico.
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La actriz, que actualmente está comprometida con Machine Gun Kelly, ha querido atajar las especulaciones al respecto asegurando que no piensa dar nombres.
«Sólo me he relacionado públicamente con unas pocas personas, pero he compartido energía con personas que supongo que podríamos decir que eran horribles. Y también gente muy famosa, muy famosa«, ha explicado en el programa «Good Morning America». «Pero nadie sabe que estuve relacionada con esas personas».
Aunque Fox no menciona directamente a ninguno de sus amantes pasados o presentes por su nombre, muchos de los poemas hacen hacen referencia a un «narcisista de 32 años» y una «estrella de rock complaciente» con un problema de adicción a las drogas que ninguna cantidad de oraciones podrá curar jamás. Muchos han identificado a esa persona como MGK, sobre todo porque Megan asegura que nunca la abandonará a pesar de que la está matando porque es su «llama gemela», que es como se refiere a menudo al músico.
Su objetivo es que sus palabras puedan inspirar a otros para que recuperen su felicidad y su identidad usando su voz para «iluminar lo que ha sido enterrado, pero no olvidado, en la oscuridad».