El pasado mes de julio salía a la luz que Cristiano Ronaldo había decidido poner a la venta su avión privado, un majestuoso Gulfstream G-200 que había comprado en 2015 por un precio que rondaba los 20 millones de euros.

Ahora, después de varios meses y según publica ABC, ha conseguido encontrar un comprador, aunque por el momento no ha trascendido ni su identidad ni el precio que ha pagado por él. Y es que el jet que tanto hemos visto en las redes sociales del futbolista y de Georgina Rodríguez, también en su documental para Netflix, es toda una pieza de colección puesto que tan solo existen 250 unidades en todo el mundo.

El modelo que tanto han utilizado Ronaldo y su familia comenzó a fabricarse en 1999 y la compañía dejó de hacerlo en 2011. Cuenta con capacidad para diez personas, es capaz de alcanzar las 560 millas por hora (900 kilómetros por hora) y dispone de todo tipo de lujos a bordo, desde nevera, horno o microondas hasta conexión wifi, teléfono y un sistema multimedia envidiable.

Durante los más de siete años que ha tenido el avión privado entre sus bienes no solo lo ha utilizado para su disfrute personal y el de su familia, sino que además ha sabido hacer negocio con él cuando no lo ha necesitado.

Tal y como publica el mismo medio, Ronaldo puso su avión en manos de una empresa para que lo alquilara a otros jugadores de fútbol o empresarios por un precio situado entre los 6.000 y los 10.000 euros por hora.

Así conseguía hacer frente a los descomunales gastos de mantenimiento, aunque Ronaldo tenía contratada además una tripulación de tres capitanes y dos auxiliares de vuelo. Cristiano y Georgina han utilizado el avión para sus traslados a Arabia Saudí tras el fichaje del jugador por el Al-Nassr, club con el que el de Madeira firmó un contrato de 200 millones de euros anuales.

Fuente: Diario AS