Britney Spears no consiguió liberarse de su padre, puesto que la jueza que lleva el caso de la cantante en Los Ángeles rechazó su demanda para que Jamie Spears deje de ser su gestor y administrador de sus más de 60 millones de dólares.

El fallo no es bien acogido por la artista, puesto que poco después sus abogados manifestaron que ante el temor que siente hacia su progenitor «no volverá a cantar si él sigue a cargo de su carrera«.

A pesar de esta advertencia, la jueza Brenda Pennyse negó a suspender al padre de Spears, aunque se mostró partidaria de escuchar los argumentos futuros para su suspensión o expulsión, que el abogado de Britney, planea presentar.

Así mismo, Pennyse fijó otra audiencia para el 16 de diciembre, según una orden presentada en el expediente del caso. Recordemos que la «princesa del pop», se encuentra en una pausa indefinida de su carrera, pero trabaja activamente por recuperar el control de su vida y su dinero tras 12 años de una tutela judicial ejecutada principalmente por su padre.

Periodista: Samantha Molina