Rafael Nadal es historia viva del tenis. Se consagró campeón de Roland Garros por decimocuarta vez tras vencer a Casper Ruud en la final por 6-3,6-3 y 6-0. Siempre que llegó a la final en París, se fue victorioso (14 de 14). Muchos jugadores han dicho que ganarle al mallorquín en el Bois de Boulogne es el mayor desafío para un deportista, y Rafa, una vez más, lo confirmó.

Nunca se puede dudar del Rey de París. Es el patio de su casa y se lo hizo sentir al noruego desde el minuto uno. En el primer set, desplegó un tenis muy sólido y casi no le dio chances a Ruud. 11 winners, 88% de puntos ganados con su primer servicio, 100 % de efectividad en la red y dos quiebres dos veces el servicio al noruego para cerrar un gran parcial.

El protagonista del capítulo final fue uno solo y se llama Rafael Nadal. Voló a través de la pista y dio catedra con todos sus golpes. Ruud poco pudo hacer y el desenlace fue digno de la carrera de Rafa. 6-0 y un nuevo trofeo a la vitrina.

El camino hacía el título no fue fácil. Jordan Thompson (82°), Corentin Moutet (139°), Botic Van de Zandschulp (29°), Félix Auger-Aliassime (9°), Novak Djokovic (1°), Alexander Zverev (3°) y, por supuesto, Casper Ruud (8°) fueron las víctimas del dueño de casa.

Fuente: ESPN DEPORTES