Un zurdazo lejano al puro estilo Marco Asensio, evitó un nuevo desliz del Real Madrid en el estadio Santiago Bernabéu y despertó a un equipo que venció a un Granada ordenado por empuje cuando se alejó de la brillantez, para aumentar a seis puntos la distancia sobre el Sevilla.

El sexto gol de Marco Asensio en Liga sirvió al Real Madrid para dar un paso más hacia el título, reaccionar con lo justo a la eliminación copera y cerrar una mala dinámica de cuatro puntos de nueve posibles en el 2022. El único jugador que asume galones goleadores cuando faltan los grandes referentes, Karim Benzema y Vinícius.

Nadie como Carlo Ancelotti sabe cómo están sus jugadores para mantener en el ostracismo a Gareth Bale y apenas contar con Eden Hazard y Luka Jovic, pero sin Benzema y Vinícius encontró el castigo a su poca fe en las rotaciones. Insistió en la prueba fallida de San Mamés, con Isco de ‘falso nueve’. Un equipo plano, lento con balón y sin movimientos al espacio en un primer acto preocupante.

Que el líder de la Liga ha ido rebajando su factor intimadotorio es una realidad. Tan efectivo ante los grandes del campeonato como irregular ante equipos que andan en otras batallas. No faltó voluntad, pero sin la electricidad de ‘Vini’ y la magia de Benzema, todo se convierte en previsible. Apenas un amago de Rodrygo, un disparo lejano de Asensio, los intentos de Isco por lograr un imposible, acercarse a la relevancia de un 9 como Karim.

Al Bernabéu le gusta el vértigo y sestea cuando su equipo no pisa área rival con asiduidad. Desde que Asensio probó por bajo la fiabilidad de Maximiano a los trece minutos, pasaron 18 de sopor hasta que despertaron con un centro de Carvajal que desvió Neva al larguero de su propia portería. Dio paso a un arreón de tres llegadas en un minuto con Rodrygo disparando al lateral de la red y Kroos acariciando el travesaño.

Fuente: Espn Deporte