La última semana de noviembre y durante todo diciembre, al caer la tarde, la Avenida Bolívar se transforma en un paseo permanente de alegría, amor, unidad y paz. Miles de familias de todo el país, e incluso del extranjero, se deleitan con la decoración navideña y los más de 40 altares instalados en este circuito, que además de fomentar el turismo, dinamiza la economía local.

La instalación de los altares, primero en honor a la Virgen María y luego al nacimiento del Niño Dios, junto con la decoración e iluminación de la avenida, ya se ha institucionalizado como una tradición que las familias esperan con entusiasmo cada año.

Rosa Acosta, una visitante cubana que ha estado en Nicaragua en otras ocasiones, aprovechó su visita durante estas festividades decembrinas para recorrer la Avenida Bolívar.

Precioso, todo bello, bien cuidado, bien alegre, todo iluminado. Los niños felices, contentos, las familias juntas celebrando la Navidad. Yo lo veo muy bello, muy tranquilo, muy familiar, y creo que el pueblo debe estar agradecido por todos los progresos y la tranquilidad ciudadana que tiene ahora”, expresó Acosta.

Por su parte, Ruth Elena Fletes, de Managua, calificó la decoración como maravillosa.“Está precioso, está bien bonito, bien arreglado, bien iluminado, está precioso. Está muy bonito, los altares, los nacimientos, todo está precioso, como nunca antes”.

Dinamiza la economía

Para los trabajadores por cuenta propia, las actividades promovidas por el Gobierno benefician significativamente sus negocios, ya que atraen a una gran cantidad de personas.

Luz Ivania Hernández, propietaria de “Elotes Luz de Dios”, vende elotes locos a 60 y 80 córdobas y explicó que diciembre es la mejor temporada del año.

Gracias a Dios sí vendemos. Tenemos clientes que nos buscan y nos ha ido bien, gracias a Dios. Normalmente vendo 100 elotes al día, pero con esta temporada los vendo mucho más rápido. Es la misma cantidad, pero se venden más temprano, y eso es mejor”, comentó.

Las familias consultadas aseguraron que un solo día no es suficiente para recorrer todo el paseo, por lo que muchas deciden regresar para disfrutarlo por completo.

Periodista: Celia Méndez