Tras concluir al acto de conmemoración del 42 aniversario de la Fuerza Aérea de Nicaragua, la vicepresidenta Rosario Murillo se refirió a las acciones violentas del fallido golpe de estado del 2018, las cuales causaron luto y dolor en las familias nicaragüenses, pero que se han revertido a las personas que cometieron esos actos.

Murillo calificó esas acciones como satánicas, donde se destruían las escuelas, unidades de salud e infraestructuras estatales.

“Como nos dolía ver la destrucción de lo que tanto nos había costado a los nicaragüenses”, dijo la vicemandataria, quien recordó cuando quisieron destruir la bodega nacional de medicamentos, siendo este un hecho irracional y egoísta.

También recordó los actos terroristas, donde perdieron la vida militante sandinistas, hechos que no se olvidan.

“Recordamos al hijo de la compañera Amanda Pineda, ardiendo en las calles de Managua. Cuando recordamos a teniente Gabriel Vado ardiendo en Monimbó. Como olvidar a ese dizque sacerdote que desde las redes y otros medios otros medios de comunicación llamaban que fueran a tirar al compañero policía, que lo único que hacía es servir a su patria, que decía él que lo fueran a tirar al escusado”, expresó Murillo.

Agregó que pocos meses de las elecciones la población está clara de las acciones del Gobierno en el cuido de la salud, la educación, el emprendimiento, por lo que en noviembre la población va a respaldar su futuro.

Murillo dijo que, con la fe en Cristo, se trabajará para consolidar la paz del Pueblo nicaragüenses.

Periodista: Tania Sirias