El presidente Daniel Ortega y la Vicepresidenta Rosario Murillo, participaron de una reunión virtual junto a los mandatarios centroamericanos con los representantes del BIDBCIE y el Banco Mundial, donde expuso entre otras, cosas las consecuencias económicas que han dejado el paso de los huracanes Eta y Iota en nuestro país. 

El presidente destacó el trabajo que realizan las instituciones del Estado y la población organizadapara enfrentar la pandemia y los fenómenos naturales, por lo que se ha logrado reducir la cantidad de víctimas en relación a huracanes que han afectado al país en años anteriores. 

“Yo recuerdo que en 1988, cuando venía el huracán Juana, agarraba para el norte, luego para el sur y era difícil precisar la ruta que llevaría el huracán y devastó Corn Island y causó grandes daños a Bluefields, nosotros fuimos a evacuar a la gente y se negaban a salir y dejar sus hogares, sus cosas, pero ahora la gente cumplió con las orientaciones de evacuar para salvar sus vidas, señaló el mandatario en la video conferencia. 

Ortega envió sus muestras de condolencias a las familias que han perdido a seres queridos durante esta emergencia, además aseguró que en Nicaragua suman 21 personas las fallecidas entre niños y adultos

Por otra parte, se refirió a los repercusiones económicas que deja el paso de ambos huracanes, las que de manera preliminar se estiman entre el 3.5% y el 4% en relación al producto interno bruto

Una vez más el presidente Ortega, se refirió a la imperante necesidad de destinar recursos al combate al narcotráfico y al crimen organizado, sobre todo en estos momentos en que la región centroamericana está vulnerable, ya que los recursos son destinados a la atención de las familias afectadas y a la reconstrucción de la infraestructura“aquí hay prioridades, y en los últimos años nos hemos esforzado por construir hospitales en todo el país, y bueno, resultó con daños el hospital en Bilwi y ya estamos buscando los recursos porque lo vamos a reconstruir, aseguró. 

El mandatario agradeció la oportunidad de intercambio, lo que genera la esperanza en la población del acompañamiento internacional más cercano en la batalla que ahora libran las familias centroamericanas.

Periodista: Héctor Calero