Un terremoto de magnitud 6,8 sacudió el distrito de Dingri, en la región autónoma de Xizang, al suroeste de China, dejando un saldo preliminar de 95 personas fallecidas y 130 heridas. El sismo ocurrió a las 09:05 hora local en el poblado de Tsogo, afectando a unas 27 aldeas dentro de un radio de 20 kilómetros desde el epicentro. El distrito alberga una población de más de 61 mil habitantes.
La respuesta al desastre movilizó a más de 3 mil 400 rescatistas y 340 trabajadores médicos, además de 22 mil artículos de socorro, incluyendo tiendas de campaña, abrigos de invierno, y material especial para zonas de gran altitud. El gobierno central asignó 200 millones de yuanes (cerca de 27,8 millones de dólares) para apoyar las labores de emergencia y recuperación en la región afectada.
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El clima frío en Dingri, con temperaturas mínimas entre -18 y -14 grados centígrados, supone un desafío adicional para los equipos de rescate y los damnificados. Mientras tanto, la zona escénica del monte Qomolangma fue cerrada temporalmente, garantizando la seguridad de turistas y personal en el área.
La Cruz Roja de China también se sumó al esfuerzo, enviando 4 mil 600 artículos de ayuda a las comunidades más afectadas. Según expertos, la región podría experimentar réplicas sísmicas prolongadas, lo que resalta la necesidad de mantener precaución y asistencia continua en las próximas semanas.
El distrito de Dingri, ubicado en la ladera norte del Himalaya, es conocido por su altitud promedio de 4 mil 500 metros sobre el nivel del mar y por albergar el campamento base norte del monte Qomolangma. La devastación causada por el terremoto ha movilizado un esfuerzo sin precedentes en la región.
Fuente: Xinhua Español