Al menos 155 niños perecieron y 250 resultaron heridos a consecuencia del terremoto que sacudió el sureste de Afganistán la semana pasada, informó hoy la Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios.

El temblor perjudicó las regiones montañosas de las provincias de Paktika y Khost, próximas a la frontera con Pakistán, derribando viviendas y provocando corrimientos de tierra, también dejó a otros 65 niños huérfanos o sin hogar, reflejó la agencia de noticias The Khaama Press.

Miles de afectados por el sismo en Afganistán necesitan agua potable y alimentos y corren el riesgo de contraer enfermedades, alertó el portavoz del Ministerio de Salud, Sharafat Zaman.

Más de mil personas murieron, casi tres mil resultaron heridas y 10 mil viviendas quedaron destruidas por el terremoto, tras lo cual la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU advirtió sobre brotes de cólera.

El sismo de magnitud 5,9 se sumó a la grave crisis humanitaria y económica del país, con millones de personas padeciendo hambre, tras las sanciones y restricciones impuestas por Estados Unidos y sus aliados de Occidente, que recortaron miles de millones de dólares de ayuda para el desarrollo.

Fuente: Prensa Latia