La Organización Meteorológica Mundial (OMM) ha alertado que las emisiones de CO2, metano y óxido nitroso alcanzaron niveles récord en 2023, lo que representa un grave peligro para el clima global. La acumulación de estos gases de efecto invernadero podría llevar a un aumento sostenido de las temperaturas, afectando de forma irreversible los ecosistemas y la vida en el planeta.

Según el Boletín de la OMM, las emisiones derivadas de la quema de combustibles fósiles, los incendios forestales y una posible reducción en la capacidad de absorción de carbono por parte de los bosques han sido factores claves en el incremento de estas emisiones. Estos fenómenos están intensificando la crisis climática y generando condiciones ambientales sin precedentes para la humanidad.

La OMM destacó que los niveles de CO2 actuales no se habían visto en la Tierra en millones de años, siendo un “territorio inexplorado”. Además, se ha registrado un aumento del 11% en la concentración de CO2 en las últimas dos décadas, una tasa de crecimiento sin precedentes en la historia de la humanidad.

La secretaria general de la OMM, Celeste Saulo, advirtió que este nuevo récord “debería hacer saltar todas las alarmas” para los líderes mundiales, ya que la humanidad está lejos de cumplir los objetivos climáticos establecidos en el Acuerdo de París. Saulo explicó que la acumulación de gases continuará mientras las emisiones no se reduzcan drásticamente.

Ko Barrett, secretaria adjunta de la OMM, expresó su preocupación de que el cambio climático pueda convertir a los ecosistemas en emisores netos de gases en lugar de sumideros. La advertencia de la OMM indican la urgencia de tomar medidas inmediatas para mitigar las emisiones y proteger el futuro climático del planeta.

Fuente: teleSUR