El Gobierno de Brasil anunció el lunes el envío de misiones mediadoras a dos regiones del oeste y el sur del país donde se han registrado violentos enfrentamientos entre miembros de comunidades indígenas y propietarios rurales en la última semana que arrojaron, al menos, tres nativos heridos por armas de fuego.

Los grupos negociadores fueron enviados a los estados de Mato Grosso do Sul y Paraná con el objetivo de «garantizar la protección» de varias familias pertenecientes a las etnias guaraní kaiowá y avá guaraní que, al intentar recuperar tierras de las que fueron desalojados, fueron repelidos por disparos de pistoleros.

Según fuentes gubernamentales, las misiones están integradas por funcionarios del Ministerio de los Pueblos Indígenas y del Ministerio de Derechos Humanos e intentarán «mediar en los conflictos» para proteger a los nativos. Asimismo, se sigue una situación similar con los indígenas de la etnia Kaingang en el estado de Río Grande do Sul.

En un comunicado publicado por medios oficiales, se supo que el pasado fin de semana un grupo de indígenas guaraní kaiowá intentó reconquistar territorios en Douradina y Caarapó, municipios del estado de Mato Grosso do Sul, donde se han asentado tradicionalmente, pero fueron rechazados a balazos.

Un primer ataque emprendido por cerca de 50 hombres armados contra diez indígenas acaeció el sábado en Douradina y, al día siguiente, se registró uno similar en Caarapó. Como resultado, al menos dos indígenas sufrieron heridas, entre ellos un cacique de 52 años, mientras que un líder religioso fue agredido.

Douradina y Caarapó punto de conflicto

El Ministerio de los Pueblos Indígenas subrayó que las tierras reivindicadas por los guaraní kaiowá en dicha región fueron otorgadas por el Gobierno en 2011 y 2016, aunque los colonos todavía las ocupan, pues se encuentran en una batalla legal que aún es analizada por la Justicia.

Por su parte, el conflicto localizado en Paraná comenzó el 5 de julio, cuando 22 familias avá guaraní ocuparon zonas que les pertenecen en la Tierra Indígena Guasu Guavirá, delimitada por el Gobierno en 2018 e igualmente ocupada por colonos. Los indígenas fueron rechazados por pistoleros contratados por propietarios rurales.

Uno de los primeros anuncios del actual Presidente Luiz Inácio Lula da Silva al asumir su nuevo mandato, en enero de 2023, fue la creación del Ministerio de los Pueblos Indígenas para atender a etnias que fueron ignoradas y sus territorios amenazados durante la gestión del ultraderechista Jair Bolsonaro (2019-2022).

Fuente: teleSUR