El huracán Beryl deja ocho muertos y casi tres millones de personas sin electricidad tras azotar el sureste de Texas y Luisiana.
Beryl, que descendió de la categoría de huracán a tormenta tropical el lunes en la madrugada después de llegar al sureste del estado el domingo, continuará su avance hacia el centro del país y la región de los Grandes Lagos, así lo informó el Servicio Meteorológico Nacional (NWS).
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Aunque se espera que la tormenta continúe disminuyendo, el NWS advirtió que existe la posibilidad de inundaciones en todo el estado y en las costas.
En Estados Unidos, las autoridades dijeron que siete personas habían muerto en los condados de Harris y Montgomery en Texas, mientras que se confirmó una muerte más en la vecina Luisiana.
Agregaron que cuatro personas murieron en el área de Houston, la ciudad más poblada del estado y una de las más afectadas por la tormenta, incluyendo un oficial de policía local.
En el condado de Harris, que incluye partes de Houston, se informó que la abuela María Loredo, de 73 años, murió después de que un árbol se estrellara contra el techo de su casa, según KHOU, afiliada de CBS.
La familia de Loredo dijo a la estación de noticias que ella estaba en casa con su hijo, su esposa y sus dos nietos, de dos y siete años, cuando cayó el árbol. Ningún otro miembro de la familia resultó herido.
También en el condado de Harris, un empleado del Departamento de Policía de Houston, Russell Richardson, de 54 años, se ahogó después de intentar conducir a través de aguas altas en su camino al trabajo, según la policía de Houston.
El vicegobernador del estado, Dan Patrick, afirmó que más de 2,7 millones de personas en todo el estado están sin electricidad y que la restauración del servicio tomará «varios días».
Fuente: teleSur