Desde el pasado 7 de mayo en varias partes del mundo ya se ha detectado la presencia de la viruela del mono. Se trata de una infección muy rara, que en contadas ocasiones se había detectado en Europa, casi siempre ligada a viajes al continente africano, donde se había contraído la infección.

Los síntomas que presenta esta enfermedad en humanos son similares a los de la erradicada viruela, aunque más leves, y comienzan a desarrollarse alrededor de 6 y 13 días después de haberse producido la infección, aunque el periodo de incubación puede variar entre los 5 y los 21 días.

Los primeros síntomas son la fiebre, el dolor de cabeza, cansancio, dolores musculares y de espalda, así como la inflamación de los ganglios linfáticos. Este último síntoma es uno de los que lo diferencia de la viruela humana, en la que la linfadenopatía es infrecuente.

Entre uno y tres días después comienza a aparecer una erupción que suele iniciarse en la cara para después extenderse a otras partes del cuerpo. Tras el rostro, en el 95 % de los casos, los lugares más frecuentes donde aparecen estas lesiones son las manos y las plantas de los pies, en el 75 %, aunque puede aparecer en otros lugares, incluidos los genitales.

Fuente: RT en Español