Esta semana Kylie Jenner se propuso demostrar que está completamente involucrada en la creación de los productos de su marca de cosméticos compartiendo una fotografía suya con una bata blanca mientras «creaba nueva magia» en una de sus instalaciones en Milán, Italia.

Esta publicación ha provocado un aluvión de críticas por parte de expertos en el sector, empezando por un desarrollador de cosméticos llamado Kevin James Bennett, quien le ha respondido asegurando que nunca en toda su carrera había visto a nadie en un laboratorio sin redecilla para el pelo, guantes y protectores para los zapatos.

El revuelo que se ha generado ha sido tal que Kylie ha acabado por responderle para confesar que en realidad no estaba en la planta donde se realiza la producción en masa: «Nunca me saltaría los protocolos sanitarios ni tampoco lo haría ninguna otra celebridad o propietario de una marca de belleza. Esto es completamente inaceptable, estoy de acuerdo. Estaba en un pequeño espacio personal en el que creo mis propias muestras por diversión y tomo fotos para crear contenido«, ha aclarado.

La joven empresaria ha recalcado que la calidad de Kylie Cosmetics no se ha visto comprometida y que ninguno de sus consumidores corre peligro para lamentar que se haya puesto en entredicho su ética profesional con tanta ligereza.

Fuente: RT en Español