La noche fue emocionante y quizá por eso, los nervios le jugaron una mala pasada a la cantante Camila Cabello, quien causó un enorme revuelo a su llegada al “The Greek Theatre” de Los Ángeles (California), donde presentó la película Cinderella, una versión moderna del clásico “La Cenicienta” que supone su debut como actriz.

Antes de la proyección de la película, los actores se subieron al escenario para decir unas palabras. Sin embargo, Camila no estaba entre ellos y el público se preocupó porque no sabían qué había sucedido. Pasados unos minutos, la artista apareció y, con su espontaneidad habitual, dijo: «Lo siento… Me he desmayado, pero ya estoy de vuelta».

La intérprete de éxitos como Señorita, reconoció que había cumplido un sueño al interpretar a este personaje, aunque la experiencia había sido totalmente diferente. Con un vestido espectacular de Oscar de la Renta, botas altas de la firma Casadei y un peinado de inspiración flamenca que no dejó indiferente a nadie, la novia de Shawn Mendes desfiló por la alfombra morada convertida en una Cenicienta moderna.

Periodista: Samantha Molina