Gareth Bale está de vuelta en el Real Madrid 26 días después de su eliminación en la Eurocopa y 307 días después de su cesión al Tottenham la pasada temporada. El galés vuelve decidido a agotar en el conjunto blanco el año que le resta de contrato. Regresa para quedarse.

Bale lleva muchos veranos siendo un problema para el Real Madrid y el actual no será una excepción. El club blanco se dio un respiro la pasada temporada con la cesión al Tottenham tras varios años buscándole acomodo, pero a su regreso la sensación es que será misión imposible encontrar una solución que no sea hacerle un hueco en la plantilla.

El jugador se quiere quedar y agotar en el Real Madrid el año que le queda de contrato. Disipados los rumores de una retirada, Bale no sólo quiere seguir jugando, sino que lo quiere hacer en el conjunto blanco, cerrándose en principio a la posibilidad de agotar su contrato en otro equipo. No lo ha dicho Bale, pero sí Barnett, su agente.

En el Real Madrid están resignados a quedarse con Bale. Más allá de cuestiones deportivas, el principal problema es la elevadísima ficha que tiene, que en tiempos de crisis supone una dura carga. Sin embargo, el Madrid ya se ha hecho a la idea de que el ‘caso Bale’ no va a tener otra solución.

Fuente: Diario Marca