Un incendio en el barrio de Santa Cruz, en la capital filipina de Manila, destruyó más de 250 hogares este jueves, afectando a unas 500 familias. El fuego comenzó la noche del miércoles y fue controlado en la madrugada del jueves por los bomberos.

La mayoría de las viviendas eran de madera, lo que aceleró la propagación del incendio, según las autoridades. El portavoz del cuerpo de bomberos explicó que la densidad del área dificultó la identificación del origen del fuego.

Este incendio ocurre solo unos días después de que otro siniestro dejara a 8 mil personas sin hogar en el barrio de Isla Puting Bato, en el Puerto Norte de Manila.

Los incendios urbanos son comunes en Manila, donde las condiciones de hacinamiento y la falta de medidas de seguridad aumentan el riesgo de tragedias como esta.

Las autoridades locales están brindando ayuda a las familias afectadas mientras continúan las investigaciones sobre el origen del incendio.

Fuente: teleSUR