En un acto en que se reconoció la labor, sacrificio y entrega de extranjeros en la lucha por la liberación de Nicaragua, el presidente Daniel Ortega en compañía de la vicepresidente Rosario Murillo abordó el momento peligroso que vive la humanidad, cuando las grandes potencias apoyan actos de genocidio como el cometido por Israel en contra de Palestina, apoyada por Estados Unidos y algunos países europeos, pero la esperanza se ve en las voces que en esas mismas naciones se están levantando en protesta por el financiamiento de esas guerras.
“Los pueblos han batallado y siguen batallando por la paz del mundo, hoy más que nunca, demanda La Paz y vemos a la juventud norteamericana levantando la protesta, la condena al genocidio que se está cometiendo en contra del pueblo palestino, la juventud norteamericana protestando en estos momentos y se multiplica la protesta, no solamente en Estados Unidos, sino que en todos los países de nuestro planeta, los pueblos no pueden aceptar, no pueden entender que se esté cometiendo un genocidio con la participación de los poderes de los imperios, encabezados por los gobernantes norteamericanos, los alemanes, los ingleses los franceses”, enfatizó el mandatario.
El mandatario recordó una vez más que son las grandes potencias, las que utilizando los recursos obtenidos del pago de los impuestos de sus pueblos los que buscan hacer la guerra para apoderarse de los recursos naturales de otras naciones, para ello utilizan sus armamentos, como las bombas atómicas que Estados Unidos lanzó contra dos ciudades de Japón, y hoy es más peligroso porque son muchas las naciones del mundo que cuentan con esas bombas, por lo que la humanidad entera está expuesta a la destrucción.
Ortega se refirió también a la situación de la República Popular China, cuyo crecimiento ha sido satanizado por Estados Unidos, cuando esta nación ha ofrecido su apoyo a los países en vías de desarrollo en Asia, África, Latinoamérica y el Caribe, con cooperación y préstamos para mejorar las condiciones de vida de esos pueblos como el nuestro, sin embargo Estados Unidos los ataca porque los ven como una amenaza, cuando es justamente el país del norte el que en vez de llevar ayuda a otras naciones, lleva sus bases militares e inciden en los asuntos internos de esas naciones.
El mandatario se refirió a la actual situación de la Organización de Naciones Unidas (ONU), de la que puso en duda su utilidad, pues a pesar de las votaciones para que se termine el bloqueo en Cuba y para que Palestina ocupe su lugar dentro de la Organización, el veto de Estados Unidos e Israel se imponen sobre el voto a favor del resto de las naciones del mundo, “para qué es buena (Naciones Unidas), para nada, más que para ocupar un asiento y hablar, pero de hablar a actuar no es más que un instrumento de los imperialistas de la tierra, porque en Naciones Unidas todos los años se vota para que se levante el bloqueo en contra de Cuba y solamente han habido dos votos en contra, dos votos, porque se mantenga el bloqueo, Estados Unidos e Israel y no los pueblos, son los gobiernos, sencillamente eso es un veto, eso no es democracia, porque si la gran mayoría está votando a favor de que se levante el bloqueo, entonces ¿para qué sirven Naciones Unidas?, si no se respetan reglas que son fundamentales como las que tienen que ver con la votación de un inmenso mayoría de países incluyendo países capitalistas», mencionó el Presidente luego de recordar también la historia del lucha del pueblo Cubano, por la libertad y la defensa de su revolución y considerar que ese bloqueo que se impuso desde 1959, es otra forma de genocidio en contra del pueblo cubano.
Recordó también que esas intromisiones a los asuntos internos de otras naciones, Nicaragua las ha vivido muchas veces, y la última fue en 2018, cuando las agencias estadounidenses articularon y organizaron un levantamiento en nuestro país, destruyendo el patrimonio y asesinando y quemando a varias personas, cuando el país mantenía una línea de crecimiento sostenido gracias a los acuerdos con la empresa privada, intento que se contuvo por la fuerza del pueblo y se continuó con la construcción de más hospitales, escuelas y carreteras, incluyendo algunas que constituían un sueño, como son las de Bluefields y Bilwi, que unen en Caribe sur y norte con el pacífico.
Por último Daniel Ortega aprovechó para saludar a los trabajadores en su día, retomando el compromiso por seguir mejorando sus condiciones, la cantidad de empleos y los beneficios a los que tienen derecho, al mismo tiempo destacó el trabajo de la juventud en los programas que son de beneficio social y la entrega de los pueblos por un mundo de paz, “como lo decía al comienzo, se está luchando en los Estados Unidos como cuando se luchó por la guerra de Vietnam, que la lucha que se libró en Estados Unidos fue determinante, ahora se está luchando también en Estados Unidos y se está luchando en Europa, porque los pueblos son más poderosos que los dueños de las bombas atómicas y son los pueblos los que seguirán venciendo y será la paz que alumbrará donde hombres y mujeres de todo el planeta vendremos a ser hermanos, que viva la paz, que viva la humanidad, que viva la solidaridad”, concluyó.
Periodista: Héctor Calero
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