Con el grito del obispo de la Catedral de León monseñor Sócrates René Sándigo: ¿Quién causa tanta alegría? y la repuesta de los devotos de la Virgen ¡La Concepción de María! se inició la Gritería en la «Ciudad de los Caballeros».
La celebración mariana inició a las 6 de la tarde en medio de cohetes, toros encuetados, gigantonas y filarmónicos que se concentraron en la entrada principal de la catedral construida entre 1747 y 1816.
Varias gigantonas y sus enanos cabezones danzaron en la ceremonia del lanzamiento de La Gritería. Las Gigantonas fueron llevadas por el INTUR, mientras al frente de la Alcaldía de León fueron instalados altares a la Virgen María de varias instituciones entre ellas la UNAN-León.
Monseñor Sándigo en su mensaje cristiano llamó al pueblo mariano a celebrar a la Inmaculada Concepción de María en el sitio donde hace 166 años se lanzó el grito ¿Quién causa tanta alegría?, ¡La Concepción de María!
El prelado en sus palabras invitó a los leoneses a que “vayamos esta noche a saludar a la Madre” (en cada uno de los altares de la Virgen María en todos los barrios de León).
Así mismo el obispo de la diócesis de León dijo “reconocemos eso con los cantos que escribió el maestro Alejandro Vega Matus para la Virgen que todos los sabemos y se los cantamos a la Virgen”.
“Ahora nosotros repetimos la historia mariana después de muchos años y lo hacemos desde esta sede León donde por primera vez resonó ese grito para invadir todo nuestro país y hacer y como siempre una noche mariana en la que crece el amor hacia la Santísima Virgen María», indicó el prelado.
Los miles de devotos a la Virgen María después del grito del obispo presenciaron más de media hora juegos pirotécnicos que “adornaron” la catedral de la ciudad de León.
La alcaldesa de León Guissela Lacayo dijo “estamos celebrando con fe, amor y devoción la Concepción de María, una festividad religiosa tan importante para nosotros los leoneses«.
Añadió que el grito de La Concepción de María primero se inició en León Viejo, hoy Momotombo, pero luego se trasladó al León actual donde nace la festividad de La Gritería.
Le agradecemos a la Virgen por la paz y tranquilidad “porque estamos trabajando con el gobierno del Comandante Daniel y la Compañera Rosario. León se desbordó desde las primeras horas de este 7 de diciembre”.
Después del grito del obispo, el pueblo mariano se trasladó a los diferentes barrios de León donde recibieron la gorra que contiene una serie de productos propios de la temporada.
Orlando Cortez de 83 años recordó a El 19 Digital datos históricos sobre la tradición mariana. Dijo que esa tradición la trajeron a Nicaragua los misioneros españoles.
El origen de la novena en Nicaragua se remonta al año 1742 y surgió en la iglesia de San Francisco de la ciudad de León. El 7 de diciembre de 1857, monseñor Gordiano Carranza, desde el atrio de la iglesia de San Felipe, animó al pueblo a visitar casa por casa y a levantar sus propios altares, rezar, cantar y gritar a la Virgen.
Desde León, la celebración se extendió a Masaya, Managua y Granada, convirtiéndose así en la fiesta religiosa y folklórica más importante de Nicaragua.
Con respecto a la gorra, dijo que es el brindis que reciben los devotos y consiste tradicionalmente en dulces típicos preparados para la ocasión, como gofios de pinolillo, cajetas de coco, de leche, de zapoyol, leche de burra, coyolitos, huevos chimbos, etc.
También se incluyen, platillos típicos como el nacatamal, vigorón, indio viejo, bebidas típicas como chicha de maíz y cacao con leche, así como postres típicos y juguetes tradicionales. Desde la década de los 80 del siglo XX, se ha generalizado que la gorra esté compuesta por artículos de uso cotidiano, como cajetillas de fósforos, y juguetes para niños.
Antes de las 7 de la noche se activaron los devotos de la Virgen en todos los barrios. La Gritería en León tiene diferencias con Managua porque en la ciudad de los Caballeros los altares se levantan dentro de las viviendas, en la capital los instalaron al frente de las viviendas.
En el barrio Zaragoza doña Alma Núñez Téllez, dijo que ella continuó la devoción de su abuelita en gritar a La Purísima. Expresó que buscaron un pintor que hiciera el escenario que consistió en la iglesia de San Francisco donde nació la tradición.
Don Isabel Mendoza quien andaba gritando con su familia hizo énfasis que este es un momento de fervor cristiano, además que es una celebración que realizamos en toda Nicaragua.
Indicó que León se diferencia de todos los departamentos del país porque solamente dice ¿Quién causa tanta alegría? Y hay nomás recibe la gorra.
En el barrio Sutiaba, Gilbert Sevilla dijo que esta tradición de La Gritería se va transmitiendo de generación en generación, mientras que Carlos Manuel Téllez expresó que “esta es una tradición que la vivimos en el corazón y pueden ver a la población católica quienes andan gozando».
Gloria Victoria Padilla, reconoció que por tradición le grita a La Purísima y “me siento gozosa porque así quería ver a la Virgen rodeada de flores de madroño». Ella en su altar tenía una estatuilla de la Virgen que tiene más de 50 años.
Fuente: El 19 Digital
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