En una reciente entrevista con la revista Time, el Presidente de El Salvador, Nayib Bukele, afirmó que aún hay miles de pandilleros por detener en el país. Según Bukele, a pesar de los esfuerzos y recursos invertidos, se estima que unos ocho mil pandilleros continúan en las calles. El objetivo del Gobierno es capturar al menos la mitad de ellos para reducir su capacidad de confrontar a las autoridades.

Pandilleros capturados en el salvador © Red Social X

El diario La Prensa Gráfica (LPG) destacó que las declaraciones del presidente coinciden con las del ministro de Justicia y Seguridad Pública, Gustavo Villatoro, quien describió el régimen de excepción como la última herramienta disponible para restaurar el Estado de derecho en el país. Sin embargo, no se han dado detalles sobre las zonas más afectadas por la actividad pandilleril, ya sea en áreas urbanas o rurales.

LPG subraya que, en los planes a mediano plazo del gobierno, no se contempla la desmilitarización de la seguridad pública. Además, la publicación señala que el proyecto político de Bukele se caracteriza por un control político y social, consolidado a través de una postura autoritaria frente a la amenaza de las pandillas.

El periódico también reflexiona sobre cómo la administración de Bukele logró justificar la restricción de derechos durante el régimen de excepción, lo que le ha permitido mantener un alto nivel de aprobación entre la ciudadanía. Según LPG, esta narrativa ha sido un componente clave en la reciente campaña electoral, con la población creyendo firmemente en la victoria sobre las pandillas.

Finalmente, LPG advierte sobre el riesgo de que la propaganda gubernamental, al correr más rápido que el análisis y la discusión, se convierta en una verdad aceptada por la sociedad, solo para ser desmentida por la realidad en el futuro.

Fuente: Prensa Latina