Una persona que trabajaba en los servicios de seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) falleció este 13 de mayo durante un ataque en la Franja de Gaza. Se trata de la primera muerte de un funcionario directo de este organismo internacional desde que comenzó la guerra el pasado 7 de octubre.
El funcionario, del cual aún no se conoce su nombre, laboraba en el Departamento de Seguridad de las Naciones Unidas. El automóvil en el que viajaba fue impactado cuando se dirigía a un hospital en Rafah , de acuerdo con declaraciones de Farhan Haq, portavoz adjunto de la Secretaría General de la ONU.
Esta es «la primera baja internacional» de las Naciones Unidas desde que comenzó la guerra en la Franja de Gaza, donde ya han muerto casi 35,000 personas como consecuencia de los ataques israelíes. Hasta el momento, la ONU no ha atribuido el ataque a ninguna de las partes del conflicto.
Haq recordó que alrededor de 190 trabajadores palestinos de la ONU han muerto a causa del conflicto. Casi todos, dijo, eran miembros de la Agencia de la ONU para los refugiados Palestinos (Unrwa).
«Hoy un vehículo de la ONU fue impactado en Gaza, matando a uno de nuestros colegas e hiriendo a otro (…) Hay que proteger a los trabajadores humanitarios. Condeno todos los ataques contra el personal de la ONU y reitero mi llamado urgente a un alto el fuego humanitario inmediato y la liberación de todos los rehenes», escribió el secretario general del organismo, Antonio Guterres, en sus redes sociales.
La noticia se da a conocer en momentos en las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) realizan distintas incursiones en Rafah, la zona fronteriza de la Franja de Gaza con Egipto, donde hay millones de palestinos civiles refugiados, aunque miles de ellos ya fueron desplazados.
La (Unrwa) afirma que alrededor de 80,000 personas han huido de Rafah en los últimos tres días desde que Tel Aviv intensificó sus operaciones militares en esta ciudad del sur de Gaza.
Esta misma agencia humanitaria ha advertido que, si las fuerzas israelíes invaden Rafah a gran escala, existe el peligro de que suceda «un baño de sangre».
«Una ofensiva israelí en Rafah significaría más sufrimiento y muertes de civiles. Las consecuencias serían devastadoras para 1,4 millones de personas. La UNRWA no está evacuando: la agencia mantendrá su presencia en Rafah el mayor tiempo posible y seguirá proporcionando ayuda vital a las personas«, publicó la (Unrwa) en sus redes sociales.
Fuente: Sputnik Mundo
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