El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, se reunió este martes con las principales autoridades del país para discutir medidas urgentes frente a la crisis climática que atraviesa el país. La reunión se centró en la expansión de incendios que afectan al territorio nacional desde hace más de un mes, y se planteó la necesidad de solicitar ayuda internacional.

Durante el encuentro con miembros del Parlamento, la Corte Suprema y científicos, Lula advirtió sobre la gravedad de la situación climática. Señaló que la naturaleza está reaccionando a la falta de responsabilidad humana, y que es imperativo actuar antes de que los daños sean irreversibles.

El mandatario atribuyó gran parte de los incendios a la sequía más severa registrada en décadas, afectando más del 50% del territorio. Además, mencionó la posibilidad de que algunos de estos incendios sean provocados intencionalmente, aunque aún no se tienen pruebas concluyentes al respecto.

En Río de Janeiro, 20 personas fueron arrestadas por iniciar incendios deliberadamente. En respuesta, Lula anunció la firma de un pacto climático con las autoridades de la Cámara, el Senado y el STF, con el objetivo de coordinar acciones inmediatas para enfrentar la crisis.

La sequía de 2024 ha afectado duramente regiones como la Amazonía y el Pantanal, mientras que el Gobierno brasileño trabaja para obtener recursos adicionales tras la aprobación de un juez de la Corte Suprema que permitirá liberar presupuestos extraordinarios para combatir la emergencia climática.

Fuente: teleSUR