Las ciudades de Gaza, Khan Yunis y Rafah continuaron hoy bajo fuego del Ejército israelí en medio de crecientes temores de una ofensiva contra el sur de la Franja, donde se refugian más de un millón de palestinos.
Anoche y en la madrugada de este viernes decenas de ciudadanos murieron o resultaron heridos en los bombardeos de la aviación y la artillería contra varias zonas del enclave costero, reportó la agencia oficial de noticias Wafa.
- Te puede interesar: Identifican 50 cuerpos de fallecidos por incendios en Chile
Aeronaves israelíes lanzaron numerosos misiles contra los barrios de Al-Rimal, Al-Sabra, Al-Zaytoun, Tal Al-Hawa y Sheikh Ajlin, en la norteña urbe de Gaza, lo que provocó víctimas mortales y lesionados, agregó.
Mientras, las cañoneras dispararon proyectiles contra la zona del puerto de pescadores, al oeste de esa localidad.
Wafa anunció el deceso de cuatro personas al ser alcanzado un jardín de infantes que albergaba a personas desplazadas en la ciudad de Al-Zawaida.
También se contabilizaron varios fallecidos en ataques de la aviación contra casas en Deir al-Balah y en la vecina Khan Yunis, epicentro desde hace semanas de una ofensiva terrestre.
En esta última, un francotirador asesinó a un anciano cerca del Hospital Nasser, que lleva sitiado desde el pasado mes.
En tanto, ocho civiles, entre ellos mujeres y niños, murieron en un ataque contra dos viviendas ubicadas en Rafah, la más meridional de las ciudades gazatíes y próximo blanco de las operaciones israelíes.
Desde el anuncio de Israel de expandir la invasión terrestre a Rafah hemos visto un aumento en los bombardeos, una intensidad significativa en escala y nivel de destrucción, alertó un corresponsal en Gaza de la televisora Al Jazeera.
En los alrededores del Hospital Nasser fuimos testigos de una nueva tendencia de asesinatos selectivos, subrayó.
El periodista denunció que francotiradores israelíes mantienen rodeada la zona cercana al centro de salud y disparan a ciudadanos. Hasta el momento se recuperaron 17 cuerpos de las calles, reveló.
Fuente: Prensa Latina