El presidente Joe Biden restó importancia a los temores de que las tensiones entre Washington y Moscú por la crisis de Ucrania desemboquen en una guerra nuclear, y negó que los estadounidenses tengan motivos para preocuparse por los riesgos de un conflicto de ese tipo.

Preguntado por un periodista sobre si los estadounidenses deberían preocuparse ante la posibilidad de una guerra nuclear, Biden respondió secamente: «No«. La pregunta se produjo mientras el mandatario y la primera dama, Jill Biden, pasaban en la Casa Blanca ante un grupo de reporteros este lunes, durante un evento conmemorativo del Mes de la Historia Negra.

La pregunta estuvo tácitamente relacionada con recientes disposiciones del presidente ruso, Vladímir Putin, quien el domingo ordenó poner las fuerzas de disuasión de su país -lo que incluye las armas nucleares- en estado de alerta especial. Moscú dijo que la medida se tomó, al menos en parte, en respuesta a los comentarios de la ministra de Exteriores del Reino Unido, Liz Truss, quien dijo a Sky News que, a menos que se detenga a Putin en Ucrania, otros países de Europa del Este se verán amenazados, lo que llevaría a un conflicto con la OTAN.

«Varios personeros de distintos niveles han hecho declaraciones sobre posibles altercados, o incluso choques y colisiones, entre la OTAN y Rusia«, dijo el lunes el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov. «Creemos que tales declaraciones son absolutamente inaceptables», comentó el vocero.

El pasado jueves, el presidente de Rusia, Vladímir Putin, anunció «una operación militar especial para defender el Donbass«. En un mensaje a los ciudadanos rusos, el mandatario detalló que la finalidad del operativo es «proteger a las personas que han sido objeto de abusos y genocidio por parte del régimen de Kiev durante ocho años«.

El Ministerio de Defensa de Rusia aseguró que las Fuerzas Armadas rusas apuntan a la infraestructura militar ucraniana y no atacan ni a las tropas que deponen las armas ni a la población civil.

Fuente: RT en Español